Por Marco Antonio Pérez Gaspar/NotiCASS
Fotos Miguel Ángel Corona Barajas/ Archivos y Memorias Diversas.
La mañana de este lunes las usuarias de las redes sociales se conmocionaron de la muerte del magistrade Jesús Ociel Baena Saucedo y su pareja Dorian Herrera en su casa al encontrarse sus respectivos cuerpos sin vida en el interior del domicilio ubicado en el fraccionamiento Residencial Punto del Cielo en la ciudad de Aguascalientes.
Los colectivos de activistas empezaron hacer un llamado para que las autoridades federales atraigan el caso ante el comunicado que la Fiscalía del estado había posteado en sus redes sociales entre los hallazgos preliminares están: Un asunto de índole personal, ambas personas arribaron al domicilio en la madrugada de este día, no se encontraron daños en los accesos a la vivienda, no estaban dañadas las chapas, ni las puertas o los exteriores. no hay rastros hemáticos en el exterior de la escena del crimen, se descarta la presencia de una tercera persona en el sitio y se encontró que en sus manos uno de los cuerpos sin vida localizados sostenía un instrumento cortante”.
Por lo convocaron a una velada en la mayoría de las entidades federativas para qué esta ejecución no quede en el olvido cómo el resto de casos donde integrantes de las poblaciones Lésbico, Gay, Bisexual, Transgenéro, Travesti, Transexual, Intersexual, Queer, No Binario han sido víctimas por los discursos de odio que cada día aumentan ante el avance de los derechos humanos de este sector de la sociedad mexicana.
Siendo las 19 horas la explanada de la Estela de Luz en la Ciudad de México el punto de reunión para que activistas exigieran un alto al cese a las ejecuciones por orientación sexual e identidades de género, dos días antes se había llevado acabo por quinta ocasión la jornada “Luz por muertos” en memoria de las personas LGBTTTIQNB qué desde el Monumento a la Revolución Mexicana hasta el Hemiciclo a Juárez en la Alameda el colectivo Acciones Diversas (CADI) en donde desplegaron 13 lonas con 325 rostros de las personas ejecutadas en lo que va del año para visibilizar la violencia que este sector vive día a día iniciando por las palabras pasando por anular sus derechos para finalizar con acabar con sus existencia. En los rostros de los asistentes se nota la impotencia y la frustración de quienes no se sienten seguros ante la ola de violencia de la guerra social que cobra vidas inocentes cada día.
Ni una muerte más, Justicia para Jesús Ociel y Dorian Herrera se escuchaba a lo largo del recorrido iniciado en la avenida de la Reforma pasando por la calle Juárez hasta llegar al Zócalo capitalino, entre banderas arcoíris, velas, carteles con el rostro del magistrade una velada más exigirle al gobierno federal qué atraiga el caso y se resuelva con forme a derecho para las familias de las víctimas.